

El consumo responsable de madera contribuye al crecimiento de los bosques y por lo tanto a paliar el cambio climático.
Los bosques son importantes reservas de carbono, que absorben durante su crecimiento CO2 de la atmósfera.
Gracias a la fotosíntesis, los árboles pueden secuestrar el CO2 presente en el aire y combinarlo con el agua que consiguen del suelo para producir.
La madera contribuye a paliar el cambio climático

Investigaciones recientes realizadas por el Centro Internacional de Investigación de Huella de Carbono compararon la cantidad de emisiones de gases de efecto invernadero generados por la fabricación de productos de madera con la de materiales más comunes. La investigación demostró que se podría evitar la emisión de más de 25 toneladas de gases de efecto invernadero si los productos de madera se utilizaran en lugar de las alternativas comunes, para construir una vivienda unifamiliar.
El siguiente gráfico muestra claramente que la fabricación de elementos de construcción de madera utiliza mucha menos energía que la fabricación de otros productos más comunes como el hormigón, ladrillos, baldosas de cerámica, aluminio y acero.
De ello se deduce que cuando usted construye su casa, cuando elige utilizar madera y productos derivados sobre las alternativas comunes, saldrá una menor huella de carbono.
El grafico al lado refleja las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de los fabricantes de los diferentes componentes de la construcción en una casa de familia. Gráfico (Fuente: CRC for Greenhouse Accounting)
Lo que dicen sobre la madera los grupos conservacionistas
Que la madera es un producto ecológico no sólo lo afirman las empresas del sector de la madera, sino que viene avalado por los datos objetivos que aporta la ciencia.
“Preferir madera, papel o corcho frente a productos sintéticos o sustitutivos es ya un gesto a favor del medio ambiente y de la economía rural.” (WWF. “Guia de compra responsable de productos forestales para empresas y administraciones públicas”. 2010.)